jueves, 27 de enero de 2011

Cada uno con su tema, según su cultura.

Hay arte que te eleva espiritualmente, intelectualmente y hay otro que se crea por y para subculturas muy abajo en la escala de desarrollo intelectual y que todavía promueve, hacen apología al consumo de drogas, la violencia sexual y la discriminación sexual hacia las mujeres, o la promiscuidad sexual, todo con pachorra y como si fuera el ideal social de quienes consumen reggeatón, cumbias variadas, narcorancheras y otras "delicias" provenientes de los sectores más oscuros de varias sociedades.
Tanto al oido, como al alma y a la mente, se les enseña bajo que estímulos deben vibrar.
Lamentablemente en el arte, lo que más vende nunca es lo más "culto", ya que los consumidores promedio no pertenecen a sectores "cultos" de la sociedad.
Estoy de acuerdo con la libertad de expresión y de pensar, por supuesto, cada uno con su tema, pero de ninguna manera puedo aceptar que todo da lo mismo. Como dice Cambalache ironicamente que da lo mismo ser un señor, un maestro que un caradura o estafador. No puedo valorar una obra maestra como la 5ta sinfonía, que requiere una complejidad de conocimientos musicales e intelectual, al arroz con leche. Mientras un señor estudia desde los 5 años a tocar un violín, para con suerte a los 30 o 35 tocar en una buena orquesta, que a mi primo agarrando unas lonjas con unas cervezas arriba. Del punto de vista técnico hay mejores artistas que otros y eso no se pone a discusión de gustos: en un coro cantas entonado o desafinas, es así de simple.
Pasando la parte técnica de "que es música y que es ruido", (para saber hay que aprender), se pasa al tema gustos: y acá no hay nada escrito.
Como decía Borges, si vas a leer un libro y tú estás por encima del nivel del libro, te aburres y no te va a gustar. Si en cambio, el libro tiene un nivel intelectual más alto que el tuyo, tampoco vas a entender nada y no te va a gustar, sólo el libro que esté a tu nivel te mantendrá entretenido, con la música pasa igual. Sos una persona elemental; escuchas música poco compleja, sos una persona compleja: escuchas música más compleja en su elaboración intelectual. Cuidado que no digo buena o mala, sólo menciono que se usaron más o menos conocimientos y neuronas para su creación.
Y como mencioné antes, para educar al espíritu se lo educa en lo posible en lugares que te elevan espiritualmente, como una iglesia, no en un partido de fútbol, y la música idem. Alguna te eleva, otra te vuelve cada vez más elemental en tus gustos. Negar esto, es como negar que hay gente más educada que otra, mas buena que otra, gente mas alta que otra y gente más fea que otra. No es cuestión de agresión, algunos no eligieron ser feos, otros elijen ser mala gente, algunos elejimos música hecha por genios, otros el arroz con leche porque está de moda. Cada loco en su tema.