martes, 26 de enero de 2010

Carta al director del semanario The Clinic el 28 de enero de 2010

Antes que nada mis saludos para con ustedes.
Y digo me llama mucho la atención las contradicciones que he leído en el último número de vuestro pasquín. Una lectora que se llama a si misma progresista, democrática y no sé cuantas cosas más, se ríe de su nana que no sabe que hacer con las alcaparras que le regaló un comando piñerista. Esta lectora es tan progresista, igual que la que no sacó la bandera del che, que seguramente viven en barrios acomodados de la capital, nunca pisaron una población por el olor a roto ni se quedarían a vivir en Cuba, sin nana y sin posibilidades de poner otras banderas que el régimen permita. Porque no nos olvidemos, hay dos izquierdas, la de Stalin, Fidel, la nueva de Chávez, la de Allende y están las otras izquierdas, la del Psoe, que dejó de ser marxista, la de Bachellet y de Lagos, privatizando y haciendo libre tratados de comercios con los países capitalistas...
Y sí, se llaman de izquierdas pero gozan del capitalismo como en una orgía sin fin. Tienen buenas pegas, educan a sus hijos en los colegios más finos y distinguidos, y no toman el metro en horas pic por el olor a proletariado que hay. Incluso ustedes que se dicen anti derecha, como nombrando a la caca, usan y abusan de buena manera de la libertad de expresión de las típicas democracias liberales, o sea de derecha o de centro derecha o de centro izquierda, y estas últimas hacen diferencia en lo social y no en el resto.
Más me llamó la atención Diamela Eltit, que como la mayoría de sus "escribidores" tiene apellido típico del populacho, cuando dice en su artículo que "... el creciente aumento del delito...", pero a pesar de reconocerlo, busca la quinta pata al gato, le encuentra una reivindicación social y ataca al próximo gobierno porque ha dicho que pondrá mano dura en el crimen. Diamelita, entendemos eso de los problemas sociales que aumentan la delincuencia, pero si 20 años de concertación no fueron suficientes, ni 50 años de Fidel ni 70 del imperio comunista ruso para acabar con las mafias y delincuencia, quizás un poquito de mandar a la cárcel al que delinque, al menos nos mantiene más tranquilos y sanos a los de afuera.
Pero una puñalada fue leer a Lefküruf. Parece que ahora los mapuches son izquierdistas y apoyan a la concertación, incluso el nombra a sus presos políticos encarcelados por la concertación, pero le preocupa el nuevo gobierno. hace unos días a un carabinero por matar por la espalda a un mapuche le dieron 2 años de prisión y a unos weones que asaltaron una casa y los agarraron, 5 añitos!!!!! Lefküruf, se equivoca como de aquí a Roma, dejémonos de tonteras, de weadas, de falsas banderas. Acá en chile, un país machista, racista y clasista, te joden por el color de tu piel, por donde vives o si eres profesional o un sucio trabajador vulgar. No importa si eres de izquierda o derecha, si tienes bonito apellido y poca sangre impura, te asegura un vivir mejor, y digo poco sangre impura, porque no hace falta más que cruzar la cordillera para ver que en argentina hay más gente blanca que en chile proporcionalmente. Acá somos chiquitos, de tez trigueña o más oscura, peloepicho o llovido negro como la noche, narices nada europeas, ojos como los de comegato, motivo por el que pegó tan bien toda la onda pokemona japonecita de ojos rasgados, pero acá indígenas.
Aquí en Valdivia todos se creen alemanes y si ves dos rubios el mismo día es una fiesta o son gringos de paseo. ves los avisos de la televisión y son todos lindos, bonitos, castaños, rubios, altos, espigados y hablan en un español culturoso cuando se permite. ¿Y dónde esta la típica chilena de pelo negro lacio, pechugona, con su guatita típica y su metro y medio o metro sesenta de altura?
Que hipocresía más grande viven los chilenos, unos en condominios y otros esperando cinco años para sacarse la vesícula en un hospital del estado y muchos de esos que viven en condominios trabajan para el estado, con buena plata de sueldo y votan a la concertación. Y todavía se dan el lujo de reírse del pobre desgraciado que espera 5 años para ver si se salva o no, si llega vivo a la operación.
Y ahora los de izquierdas son pro homosexuales, no ha habido en el mundo régimen de izquierda marxista como de extrema derecha que hayan permitido el homosexualismo. y no existe el chileno de derecha, de centro o de izquierda que sienta como uno de los peores insultos al "maricón". No me imagino a ninguno de mis amigos o familiares de izquierda contentos con un hijo homosexual. Y comento esto, porque las organizaciones de homosexuales chilenos parece no haber tenido noticias de como se trata a sus pares en Cuba o como se los trató en la URSS. Claro, algún que otro dirigente homosexual también andará prendido de la teta concertacionista y se le acaba el juego y las lukas ahora.
Yo, como muchos no votamos, porque sabemos que la ley de patrón de fundo no la va a cambiar ni Piñera ni otro oligarca como lo es Frei o Lagos.
Así que: de que concertación me hablan!!!!!!

Lautaro Salgado